La salvación



La salvación.

 Juan 5:24-29 »Les digo la verdad, todos los que escuchan mi mensaje y creen en Dios, quien me envió, tienen vida eterna. Nunca serán condenados por sus pecados, pues ya han pasado de la muerte a la vida. »Y les aseguro que se acerca el tiempo —de hecho, ya ha llegado— cuando los muertos oirán mi voz, la voz del Hijo de Dios, y los que escuchen, vivirán. El Padre tiene vida en sí mismo y le ha entregado a su Hijo ese mismo poder de dar vida. Y le ha dado autoridad para juzgar a todos, porque es el Hijo del Hombre. ¡No se sorprendan tanto! Ciertamente, ya se acerca el tiempo en que todos los que están en las tumbas oirán la voz del Hijo de Dios y resucitarán. Los que hicieron el bien resucitarán para gozar de la vida eterna, y los que continuaron en su maldad resucitarán para sufrir el juicio.

Un estudio realizado por LifeWay Research sobre “posiciones doctrinales”, muestra que mientras la mayoría de los evangélicos tienen una buena comprensión de las enseñanzas doctrinales de sus iglesias, muchos de ellos tienen dificultades para explicar su fe.
Cuestiones básicas como la salvación, la Biblia y la naturaleza de Dios puede confundir a los fieles.

“Cuando te mueras, ¿irás al cielo porque confesaste tus pecados y aceptaste a Jesucristo como tu Salvador?”.

El 19% dijo que no está seguro.

26% (todos miembros bautizados en sus iglesias) creen que “si una persona está buscando sinceramente a Dios, pueden obtener la vida eterna a través de las religiones no cristianas”.

La Biblia es clara y contundente en este aspecto:

La salvación viene sólo por la fe en Jesús
Hechos 4:11 Pues es Jesús a quien se refieren las Escrituras cuando dicen: “La piedra que ustedes, los constructores, rechazaron ahora se ha convertido en la piedra principal”. 12» ¡En ningún otro hay salvación! Dios no ha dado ningún otro nombre bajo el cielo, mediante el cual podamos ser salvos».

¡En ningún otro hay salvación! No es cuestión de pertenecer a una religión o de hacer buenas obras, es cuestión de fe, es cuestión de reconocer nuestro pecado delante de Dios, nuestra insuficiencia y la necesidad que tenemos de Él y, a partir de esto, entregar nuestra vida en las manos de Él.

Hay personas que están en cualquier cantidad de religiones, incluso aquellos que se hacen llamar ateos y parecen ser buenos, “tan buenos” que a veces hasta dan ejemplos de comportamiento, pero la verdad es que “Bueno sólo hay uno, Dios” (S. Mateo 19:17 (RVR60) y que todos los humanos somos pecadores (Rom 3:23) por tanto, por intentar ser buenos NADIE se va al cielo, y es verdad que muchos han hecho muy buenas obras, pero eso no elimina el pecado que mora en ellos ni significa que no sean esclavos de dicho pecado, porque Dios nos dice a través de Su Palabra que sólo Dios puede libertarnos de la esclavitud del pecado Rom 6:16-23,
Rom 7:24-25 ¡Soy un pobre desgraciado! ¿Quién me libertará de esta vida dominada por el pecado y la muerte? ¡Gracias a Dios! La respuesta está en Jesucristo nuestro Señor.

Entonces, todos los que han muerto sin haber creído a Dios para ser libertados, sólo les queda el juicio por ser pecadores, incluso aquellos que tienen poco o mucho conocimiento de la Palabra de Dios, como revela:
Rom 2:12 (NTV) Los gentiles serán destruidos por el hecho de pecar, aunque nunca tuvieron la ley escrita de Dios; y los judíos, quienes sí tienen la ley de Dios, serán juzgados por esa ley porque no la obedecen.

Pero si sabemos que la gente no se salva por ser buena, entonces ¿cómo se salva? ¿qué debe hacer? La Biblia nos revela que Jesús dice “la verdad, todos los que escuchan mi mensaje y creen en Dios, quien me envió, tienen vida eterna. Nunca serán condenados por sus pecados, pues ya han pasado de la muerte a la vida.” (Juan 5:24) y ¿cuál es es mensaje de Jesús que se debe creer? Pues el principio de la prédica de Jesús fue que nos arrepintamos, como dice:
Mateo 4:17 A partir de entonces, Jesús comenzó a predicar: «Arrepiéntanse de sus pecados y vuelvan a Dios, porque el reino del cielo está cerca».

Y además del arrepentimiento “si ustedes reconocen con su propia boca que Jesús es el Señor, y si creen de corazón que Dios lo resucitó, entonces se librarán del castigo que merecen. Pues si creemos de todo corazón, seremos aceptados por Dios; y si con nuestra boca reconocemos que Jesús es el Señor, Dios nos salvará.(Rom 10:9-10).

Así que resumiendo, NECESITAS arrepentirte de tus pecados, creer que Jesús vive por el poder de Dios, aceptar que Jesús sea tu Señor, tu Rey, tu mandamás, el guía de tu vida, y anunciarlo con tu boca. Si no lo has hecho ¡HAZLO YA! ¡EL QUE NO LO HACE VA CORRIENDO DIRECTO A LA PERDICIÓN EN EL INFIERNO AUNQUE SE CREA LA MEJOR PERSONA DEL MUNDO! 

LA VIDA ETERNA
1) “No hay vida después de la muerte” – 1%.
2) “Cuando te mueras, irás al cielo, porque Dios es amor y todo el mundo estará en el cielo con Él” – 4%.
3) “Cuando te mueras, ¿irás al cielo porque él hizo todo lo posible para que fueras una buena persona y vivieras una buena vida?” – 7%.
“Cuando te mueras, irás al cielo porque usted lee la Biblia, se involucró en la iglesia y trató de vivir como Dios quiere que vivas” – 2%.
4) “Usted no sabe a dónde irá después de su muerte” – 5%.

Primero y principal, si no hubiera vida después de la muerte, no tendría caso que Cristo hubiera venido porque no habría nada que salvar, no tendría sentido el evangelio, estamos viviendo en vano, Cristo vino a salvarnos de la condenación eterna en el infierno, Él dijo “los que escuchan mi mensaje y creen en Dios, quien me envió, tienen vida eterna. Nunca serán condenados por sus pecados, pues ya han pasado de la muerte a la vida... Los que hicieron el bien resucitarán para gozar de la vida eterna, y los que continuaron en su maldad resucitarán para sufrir el juicio.” Así que SÍ, hay vida después de la muerte.

Segundo: como ya se mencionó, no todos irán al cielo sino sólo los que “escucharon SU mensaje y le creyeron”, más nadie. Es importante anunciar esto tal cual porque a veces pasamos esto por alto en nuestras prédicas y quienes nos escuchan casi seguro que quedarán pensando que todos van al cielo si son buenos o sin importar la religión. Fuerte pero cierto.

Tercero: Cristo no vino para que intentáramos ser una buena persona, Él vino a anunciar que nos arrepintamos de los pecados y que le creamos a Dios, como ya se dijo, NO es por las obras que somos salvos, como bien claro lo dice Efesios 2:8-9a “Dios los salvó por su gracia cuando creyeron. Ustedes no tienen ningún mérito en eso; es un regalo de Dios. La salvación no es un premio por las cosas buenas que hayamos hecho

Cuarto: Si usted cree en Jesús como se ha expuesto, Él dice que tendremos vida eterna, y ¿dónde es esa vida? Pues Él dice que “En la casa de mi Padre hay muchos lugares donde vivir; si no fuera así, yo no les hubiera dicho que voy a prepararles un lugar. Y después de irme y de prepararles un lugar, vendré otra vez para llevarlos conmigo, para que ustedes estén en el mismo lugar en donde yo voy a estar.” (Juan 14:2-3) Es claro que estaremos en la presencia del Padre ¿dónde queda eso? No lo sé, y realmente lo importante NO esa saber dónde estaremos sino CON QUIÉN estaremos, y ¡si creemos a Jesús, estaremos con Jesús! ¡ALELUYA!

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